¿Listo para olvidarte del papeleo?
Cuando llega el gran día de firmar las escrituras, no todo es sentarse y poner la firma. Hay varios personajes en escena que tienen un papel clave para que todo salga perfecto y sin sorpresas. Vamos a conocerlos:
Piensa en el notario como el juez de este partido. Su misión es asegurarse de que todo se haga conforme a la ley, que la documentación esté en regla y que nadie intente colar trampa. Pero ojo, que no es un mago: si tus papeles están mal o falta algo, no lo arregla con un chasquido de dedos. Por eso, es fundamental tenerlo todo preparado para que la firma sea un paseo y no un drama.
Aquí no hay actores secundarios. El comprador y el vendedor son las estrellas del día. Son ellos quienes deben estar presentes para firmar y que la vivienda cambie oficialmente de manos. El comprador llega con la emoción de estrenar casa y el vendedor con ganas de cerrar el trato (y cobrar, claro). Sin su presencia y firma, la escritura no vale nada.
Si la operación incluye una hipoteca, el banco también tiene que salir en escena. Su función es dar el visto bueno y firmar para que el préstamo sea legal y esté bien formalizado. Sin su aprobación, la cosa se complica y la firma puede retrasarse. Además, hay que coordinar con ellos para que el dinero esté listo justo para la firma y todo cuadre como debe.
¿Te agobia coordinar a tanta gente y papeleo?
No te preocupes, en Escrituralia somos los maestros de la coordinación. Nos encargamos de que todo el proceso fluya sin dolor de cabeza, para que tú solo te centres en disfrutar de tu nuevo hogar.
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